Un factor que influye en la decisión de compra.
En la mayoría de los casos, la fotografía es el primer contacto que existe entre un cliente y tu producto, y aunque la descripción y el precio juegan un papel importante, la calidad de tus fotos marcarán la diferencia entre hacer una venta o hacer que busquen a la competencia.
Esto cobra mayor peso si tu negocio o empresa tiene presencia en Internet, pues cada vez más personas usan este medio para informarse antes de comprar. Seguramente en estos momentos alguien está buscando justo lo que tu ofreces. Si entran a tu página web, buscarán las fotos de tus productos, y la calidad de esas fotos siempre influirán en la decisión de compra.
Fotos de baja calidad
Hoy en día ya no puedes tomar a la ligera la calidad de las fotos que subes a Internet, pues la gente que ve una foto de baja calidad, mal diseñada, mal enfocada o mal editada, asume que el producto también es de mala calidad, aunque no lo sea, pero así funciona la percepción de los clientes, incluso hasta pueden dudar sobre el servicio que recibirán y decidan mejor buscar en otro lado.
Fotos de buena calidad
Por el contrario, cuando un cliente ve fotos de buena calidad, bien iluminadas y bien editadas, asume que los productos también son de calidad y que la empresa es de confianza. Esta es una asociación de ideas que se da de forma automática, y eso los motiva a realizar la compra.
Con tantos millones de usuarios que hay en Internet en este momento y con tanta información que encontrar, asegúrate de que, si te encuentran, dejes una buena impresión y consigas que te recuerden o mejor aún, que te hagan una compra.
Para terminar, podrás ver al final una serie de fotos que encontré en Internet con fines de ilustrar este tema.